Caminar, caminar como un funámbulo por el borde afilado de la ausencia; no sabiendo si estos pasos me acercan o me alejan de lo perdido.
Caminar, caminar imaginando que recorro tu cuerpo, que tu cuerpo es este espacio que habito y que cada paso evoca cada inhalación y exhalación de tu respiración sobre mi almohada.
Caminar, caminar para olvidar que estoy lejos, que estoy cerca, y en la ilusión de un movimiento sin rumbo recordar dulcemente porqué no estás a mi lado.