
Ese sonido! Sí, es ese sonido que escucho en mi mente lo que me va a matar. Es un sonido tan agudo arremolinándose en mi cabeza, que poco a poco está causando estragos en mi vida. Ya no puedo comer en paz ni tampoco dormir casi, ya no puedo coordinar mis manos ni dejar de sentir angustia al cruzar la calle. Ese maldito sonido hace que me acurruque en cualquier lugar que esté, de un solo golpe, y me causa este retorcijón en mi estómago. Recuerdo cuando ese sonido empezó, era una especie de eco lejano que zumbaba desde lejos en mis oídos, pero poco a poco fue implantándose en mi memoria hasta que terminó por asirse a mis oídos. De noche lo escucho más fuerte de lo normal en mi cabeza sin encontrar qué es lo que lo causa. No me puedo explicar cómo o porque está allí. La única pista que tengo de su origen es que empezó en el mismo instante que la mujer de gabán rojo me beso en los labios. Desde ese día este maldito y obtuso sonido de alas de mariposa no abandona mi cabeza.
Aporte de John Blair - Bogotá 2012